Reseña: "Días eternos" de Rebecca Maizel

Título: Días eternos

Título original: Infinite Days

Autora: Rebecca Maizel

Editorial: Puck

Páginas: 384

Precio: 15€

Saga: La Reina Vampira (1/3)

Sinopsis:

Lenah Beaudonte ha sido una vampira durante cinco siglos. Quinientos años de seducción, muerte en vida y sangre. Pero sus poderes oscuros la han enfermado. Ya no soporta ser la vampira más temida del mundo. Lo que ella anhela es sentir el roce del sol en la piel, palpar el suelo desnudo con los pies, compartir el aliento de un beso humano. Lenah quiere volver a ser mortal. ¿Pero podrá hacerlo, después de siglos de la oscuridad?

Tras un largo y doloroso ritual, Lenah se despierta como una adolescente de dieciséis años en un mundo que no conoce y deberá aprender a vivir con todo lo que había perdido: el sentido del gusto, el tacto, el deseo y el amor con un humano.

Pero librarse del alma de un vampiro no es tan fácil, y sus antiguos congéneres, atrapados en un universo de decadencia y destrucción, quieren a su reina de regreso.

Días eternos     |     Noches robadas     |     Amanecer eterno

Aunque el tema de los vampiros está más que usado en el mundo de la literatura, de vez en cuando me gusta leer alguna historia protagonizada por esos seres. No voy a mentir que en Días eternos me esperaba un poco de rollo crepusculero, un vampiro y un humano enamorados, amor prohibido y esas cosas. ¡Ignorante de mí! En ese libro no nos encontramos ninguna protagonista boba, ningún amor empalagoso ni vampiros brillantes bueno, un poco sí...

En las primeras páginas creo que estaba más perdida que Lenah, que eso ya es mucho decir porqué la chica se despierta después de 100 años de sueño profundo. La chica no sabía dónde se encontraba ni qué día era, pero gracias a Dios aparece Rhode (*-*) y explica qué ha pasado. Tras una larga existencia, Lenah se cansó de ser la mujer vampiro más temida del mundo y quiso ser humana de nuevo. Rhode, su alma gemela, decidió cumplir el deseo de su amada mediante un complicado ritual, por el cual su vida terminará. Lenah se siente sola y dolida tras su pérdida pero decide empezar su nueva vida humana.

Durante el libro podemos ver dos facetas completamente diferentes de Lenah: una es la cruda y desalmada mujer vampiro que vemos en los flashbacks; y la otra es la Lenah humana. Sin dudas me gustaron esas dos Lenahs tan diferentes, me gustó ver el cambió que sufrió. Lenah cómo vampiro era un ser despiadado, mientras que cómo humana es solo una chica algo desorientada, curiosa y que intenta comprender el mundo actual. Me pareció un buen personaje, sobretodo cómo refleja lo perdida que se siente después de saltarse tantas cosas.
El protagonista masculino de ese libro es Justin. Admito que al principio le tenía bastante tirria, la protagonista nos lo presenta cómo un chico muy guapo y rico, con una novia pijilla con sus dos secuaces y... cómo que no. Lentamente, pero, vamos empezando a conocerlo mejor y podemos ver que no es el chico que aparenta ser: realmente es alguien muy agradable, cariñoso y comprensivo.
Un personaje que me encantó sin dudas es Tony. Tony añade la parte del humor al libro: es un chico que en seguida se hace amigo de nuestra protagonista. En ciertos momentos puede parecer un poco friki, está obsesionado con dibujar y sin dudas, es muy gracioso.

El tema del amor al principio me disgustó bastante: Lenah explica que los vampiros pocas veces se enamoran, pero que ella ha tenido la suerte (o quizá la desgracia) de enamorarse dos veces. Eso ya en el primer momento no me agradó, y cuando vi que Justin también le gustaba pensaba que iba a darme algo. Afortunadamente, Lenah se centra más en su vida humana así que está más pendiente de Justin que de los otros dueños de su corazón chicos, pero aún así, de vez en cuando ellos le rondan por la cabeza.

Creo que lo que me gustó más del libro fue cómo llevó la autora el tema de los vampiros. Rebecca Maizel nos explica todo a cerca vampiros y el clan que forma Lenah. Al largo del libro descubrimos que sangre prefería beber nuestra protagonista, porqué no podía sentir el tacto de ningún material, y lo que me sorprendió más: porqué los vampiros no pueden salir al sol.

La pluma de la autora me gustó bastante, Rebecca Maizel escribe de una manera bastante romántica y en cierto aspecto, sensual. Le gusta describir lo que sienten nuestros protagonistas, tanto si es felicidad cómo dolor. Lo que me molestó un poco es que repite mucho las cosas. Muchas veces repite las frases, cambiando el orden de las palabras o añadiendo algún adjetivo de más y hala. Si eso pasara tres o cuatro veces no me molestaría, pero tras encontrarse tantas repeticiones cada tres páginas pues acaba cansando.

Y ahora hablemos un poco del final. Pues por culpa de ese final he tardado tanto en escribir esa reseña. ¿Por qué? Pues simplemente porqué me dejó en shock. Los últimos capítulos están llenos de acción así que cuando llega por fin el momento de tranquilidad esperaba que allí se terminara el libro. Pero entonces, ocurre algo que es tan sorprendente que simplemente te deja sin habla. Hay cosas que se quedan al aire, sí, pero en general el final es cerrado, MUY CERRADO. Admito que al terminarlo no comprendí cómo puede haber una continuación, pero entonces leí la sinopsis del segundo libro y entendí todo. Y si no habéis leído ese libro, no leéis la sinopsis del segundo (que solo está en inglés) porqué tiene spoilers.

Días eternos es un libro que me sorprendió muchísimo, narra una historia de vampiros muy original que además está muy bien llevada. La mayoría de los personajes también están libres de tópicos, y aunque el tema del amor al principio desconcierta bastante, rápidamente veremos una historia de amor muy bonita. Si no fueran por las repeticiones de la autora, el libro me hubiera enamorado.

¿Lo habéis leído? ¿Os llama la atención? ¡Espero vuestros comentarios! :D

Muchas gracias a Puck por el ejemplar.